jueves, 2 de septiembre de 2010
Needles In My Eyes
Y así recuerdo ese día: ya había salido y me sentía como un robot, básicamente no veía por donde caminaba, solo sabía que por donde iba, estaba bien, que llegaría a destino. Como si fuera un robot: así me sentía, tan mecánico, programado, casi no pestañaba, solo caminaba, recordaba y no sentía.
Llegué a mi casa, comí y me fui a bañar, porque tenía olor a otra persona, olor a sexo, no se si existe eso, pero yo me lo sentía en el cuerpo, tenía olor a cama, que no era la mía, en fin, me sentía sucio también, por eso me bañé. Pero, me fue inevitable recordar todo lo de ese día cuando me saqué la remera. Aún así, me sentí tan mecánico, y lo peor de todo, es que me gusta ser así, había creado un escudo ante el exterior que me impedía sentir algo hacia los demás y, de esa forma, evitaba salir lastimado/decepcionado.
Es extraño recordar como me sentí esos días, porque no fue uno solo, fueron varios en los que estuve ajeno a mi cuerpo. No se si mi mente bloqueó lo sucedido esa noche, porque no recuerdo mucho, pero lo que si tengo en la mente, es lo que pensé. No estaba muy cómodo y creo que tampoco en mi cuerpo, me sentí tan extra-terrestre, no disfruté esa secuencia, pero a la vez si, es muy extraño, porque me agradó mucho estar tan frío, tratar a alguien de esa forma, me hizo sentir un poco más en guardia que de costumbre.
Aún así, ahora ya no lo es, volví a ser persona, pero sí, quiero volver a repetir esa noche, no es porque quiera estar totalmente alienizado, sino, porque quiero disfrutar mucho más, ya que, ahora, me siento cómodo con él.
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2 comentarios:
Muy personal. y si existe el olor a sexo...
a mi lista de blogs, te leeré seguido.
P.d: Tenes razón, nada significa mucho...
Si pankesito! el olor a existe! ajajajaj TE AMOO!
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