¿Y por qué si a veces se siente, es tan difícil demostrarlo?
Porque realmente si está, se siente en el corazón, como una aguja que clava y clava en cada latido. Pero, hasta el ser más fuerte teme, teme por sí mismo. Es una mezcla tan fuerte y letal, que a veces inmoviliza, hasta puede matar. Ahí, cuando uno muerde sus propios miedos, puede encontrarse cara a cara con su mayor temor; la decepción y el sufrimiento. Porque, en realidad, solo una cosa congela a los sentimientos, y es el mismo temor que se encuentra en cada hueso, célula hasta en el tejido más oculto del cuerpo y del cerebro.
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