jueves, 23 de abril de 2015

¿Y si alguna vez me enamoro?

Una vez le hablé al amor, le grité y le pedí;
Quizá hasta la estrella más lejana del planeta me haya escuchado, pero todo perdió sentido, porque de ese modo, mismo despropósito aquel que, entonces, me desgarró la garganta.
Tampoco puedo saciar mis ansias de recorrerte con la mirada noche y día, aunque el dolor del pecho me parta la cabeza contra el piso, y si te veo en la oscuridad me quedo sin habla, desde que lloro por las noche, dejé de sentir ese pedacito de cielo que me regalaste cada mañana.
Un día le escribí una carta al amor que en aquella época fue el amor de mi vida, no puedo lograr pensar si, alguna vez racionalicé mis sentimientos, porque si ahora puedo hablar, es porque logré extirparme el corazón del pecho.
Pude pedirle al cielo que aquella vez me pisaras con tus zapatillas, porque pierdo la cabeza con cada amor que cruzo, y sí pudiera decirle que, todavía muero en ese recuerdo, ya puedo decir que, logro alzarme hacia el cielo para dejar de respirar.
Esa sensación que alguna vez llamé amor, le puso color a mi sangre, aroma a mi piel, color a mi pelo y tinta a mis ojos, pero también me distorsionó la realidad, todavía recuerdo que joven era y que tan grande podía ser mi corazón.
Y si te doy mi corazón es para que lo cuides y no lo dejes olvidado en un rincón, es para que me cuides y me enloquezcas la cabeza, me pierdas en la espuma y me cortes el aire. Porque sin 5 segundos de no verte puede llegar a matarme, porque me obsesiono con el correr de las horas y pierdo la coherencia.